Laberintos taciturnos, adoquinados irregulares.
Flechas de amor con nombres de desconocidos para los transeúntes.
Reflejos del pasado danzan entre las aguas
del presente.
El tiempo desapareció entre las grietas de los muros
donde los segundos se escurren bajo mis pasos.
Las sombras abren camino a las luces en la "Plaça Reial",
y los arcos se cubren de claroscuros.
Melodías de piezas clásicas envuelven palacios y claustros,
haciéndome soñar alrededor de la Catedral.
Fotografías y texto: Neus Bonet i Sala